La cúrcuma es una planta de la familia del jengibre, nativa del suroeste de la India, y se ha utilizado ampliamente en Asia durante miles de años. Los beneficios de la cúrcuma se conocen desde la antigüedad, pero en la actualidad no muchos conocen sus propiedades curativas.
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Da efecto antiinflamatorio
Gracias a la sustancia curcumina, la cúrcuma tiene el mismo efecto que medicamentos como la hidrocortisona, la fenilbutazona y la motrina, pero sin efectos secundarios. Esto lo convierte en un excelente tratamiento para lesiones o incluso enfermedades inflamatorias del intestino.
Previene el cáncer
Se ha encontrado que, además de tratar la inflamación, esta especia también previene el desarrollo de cáncer, ya que la curcumina puede eliminar las células cancerosas dentro del cuerpo y limitar el crecimiento de los demás.
Da salud a la piel
Durante siglos, la cúrcuma se ha utilizado para preservar la belleza y la salud de la piel. Alivia el acné, arrugas, cicatrices, etc., debido a su composición beneficiosa y efecto antiséptico. En particular, se exfolia bien, elimina cicatrices e inflamaciones, y también reduce la liberación de sebo, haciendo que la piel sea más clara y más elástica.
Trata el cabello
Además de tener un efecto positivo en la piel, las especias también son beneficiosas para el cabello y el cuero cabelludo. Promueve eficazmente el crecimiento del cabello, inhibe la aparición de la caspa y también mejora la salud general del cuero cabelludo.
Reduce el peso
Hoy en día, la obesidad se está convirtiendo en el problema médico número uno. Pero la cúrcuma también resuelve este problema. Gracias a la curcumina, este milagro de las especias promueve la pérdida de peso, reduciendo así el riesgo de obesidad. Además, ayuda a desintoxicar el hígado y protege las células del daño, por lo que el proceso de quemar grasa es mejor.
Mejora la digestión.
La cúrcuma también ha encontrado su uso en el tratamiento de problemas comunes asociados con el estómago, como dispepsia, congestión de gases, úlcera gástrica, colitis ulcerosa y otros. Estimula el hígado para liberar bilis y suprime la microflora putrefactiva en el intestino.